A nosotros nos encanta tener ramos de flores en casa. ¿A vosotros?
Es precioso tener ramos de flores por toda la casa. Sobre todo en las zonas comunes. Dos problema que tenemos en nuestra casa:
1. Se nos rompen los jarrones. (Entre las mascotas y nuestras manitas de árbol para los objetos, afortunadamente no para la jardinería, se nos va el presupuesto en recipientes para plantas). ¡Menos mal que en www.hidrojardineras.com, encontramos continentes irrompibles!
2. Mantener los ramos de flores es toda una misión a completar.
Con respecto a lo de que se rompan los jarrones, poco tenemos que hacer, salvo que los compréis de materiales que indestructibles.
En lo referente a mantener los ramos de flores, sí os podemos facilitar algunos consejos.
Como seres vivos que son, las flores, cuando las apartamos de su entorno, necesitan adaptación, pero si además la estamos colocando en un lugar en el que no pueden seguir viviendo para colocarlas en un recipiente en el que su único nutriente son el agua y sus sales, pues evidentemente, se van marchitando hasta morir.
Pero en cualquier caso, si cuidamos bien los ramos, podemos aumentar la esperanza de vida de esas bellezas que caen en nuestras manos.
Aunque ya os hemos comentado que compréis recipientes con materiales que no hagan "crash", es cierto que el mejor lugar que podemos elegir para que nuestro ramo se mantenga precioso durante más tiempo, es un jarrón de cristal, ya que es en este material, en el cual se depositan menos sustancias nocivas para las plantas, y así, el agua se ensucia menos. Otra cosa diferente es cuando usamos tierra, pero entonces, ya no estaríamos construyendo un ramo, y no es el tema de este post. No obstante, es cierto que incluir en el agua donde vamos a introducir el ramo ciertas sustancias positivas para ayudar al mantenimiento, es bueno. El inconveniente de añadir conservantes al agua, es que es recomendable (sobre todo para el bolsillo), no cambiarla todos los días.
Por otro lado, una tarea fundamental, es cortar el tallo antes de depositar las flores en el agua. El corte debe ser limpio, para que así, la planta pueda absorber adecuadamente el líquido. Y algo que todo ya sabéis, los tallos, deben estar dentro completamente del agua, pues sino, no pueden chuparla.
Un último consejillo, evitad lugares en los que se acumule mucho calor, y recordad que la luz solar para según que variedades es buena, pero cuando la planta está en tierra, si la tenemos en un jarrón, lo recomendable es que los rayos de nuestra estrella, no lleguen directamente a las flores.
Esperamos que os haya gustado este post.
Un abrazo a tod@s los amantes del mundo floral y vegetal.
viernes, 8 de agosto de 2014
viernes, 1 de agosto de 2014
¿Por qué se están cayendo las palmeras en Valencia?
En estos últimos días, los medios de comunicación se han hecho eco de la caída de varias palmeras en Valencia.
La gente se alarma por las consecuencias que el derrumbe de estos ejemplares puede provocar, ya que en los últimos días, estos sucesos han causado tanto daños materiales como personales.
En primer lugar y tal y como explican los expertos en jardinería y flora, Valencia no es el hábitat original de las palmeras. Algunas especies, son más fuertes, y por lo tanto, soportan climas y terrenos extremos. Es este el caso de las distintas variedades de palmeras, pero todo tiene un límite.
Hay diferentes motivos por los que las palmeras se caen; sean o no las causas de lo que está ocurriendo en Valencia, os los contamos aquí.
1. RHYNCHOPHORUS FERRUGINEUS. (o Picudo Rojo)
Este bichito, originario del África tropical, disfruta perforando los troncos de las palmeras.
Por lo escuchado y visto, esta no sería la causa de las distintas palmeras caídas en la Comunidad Valenciana, pues cuando el Picudo Rojo ataca, la palmera tiene una apariencia amarillenta y marchita.
Eliminar la plaga de Picudo Rojo, es bastante complicado, y no existen demasiadas técnicas que permitan una solución óptima. Normalmente, se intenta tratar el ejemplar con insecticidas, tanto mediante aplicaciones foliares como mediante inyecciones, pero si finalmente no se consigue eliminar este resistente bichito, lo mejor es cortar por lo sano.
2. EL TERRENO Y EL CLIMA.
Las palmeras arraigan mejor en terrenos blandos como los del desierto, en los que penetran sus raíces varios metros hacia abajo, y por tanto, permite que la palmera disfrute de un mayor equilibrio.
Así, cuando sea el caso, si la variedad es productora de dátiles, consigue mantenerse eficazmente en pie.
Las palmeras son de secano, y por tanto, el exceso de agua o de nutrientes, puede provocar su muerte, incluso parcialmente, y por tanto, la palmera puede llegar a desplomarse sobre lo que pille debajo.
3. ESTRECHAMIENTO DEL TRONCO.
Cuando la palmera se limpia en exceso, y se eliminan demasiadas hojas verdes, se pueda dar un estrechamiento del tronco. Esto debilita a la palmera bastante, y si no consigue recuperarse puede terminar muriendo.
Está claro, que hay que eliminar las partes demasiado secas, y por supuesto limpiar para evitar plagas como la citada en el punto 1, pero hay que ser cuidadoso y meticuloso para así evitar un debilitamiento del ejemplar.
Además, limpiar con demasiado ansia, produce ciertas "heridas" en el tronco que aunque no lleven al estrechamiento del tronco, dejan secuelas en el desarrollo y vida de la palmera.
Si no limpiamos correctamente los ejemplares, puede haber excesivas hojas, que provoquen un gran peso, que la palmera en determinadas circunstancias no puede soportar.
4. ANOMALÍAS EN EL CRECIMIENTO.
Al igual que en los seres humanos, en el crecimiento de las variedades de flora, se producen anomalías. En el caso de los seres humanos, se pueden dar por dos motivos: malformaciones previas al nacimiento, o un desarrollo inadecuado. En el caso de los vegetales, lo normal es que una malformación o anomalía, se produzca como consecuencia de no proporcionar al ejemplar, los medios adecuados para su crecimiento.
Hay ocasiones, en las que lo menos que puede ocurrir, es que la palmera quede torcida para toda su vida. En otras ocasiones, se puede producir un crecimiento hacia adentro de las raíces, que hacen fuerza hacia el interior del tronco. También se dan malformaciones en las hojas, crecen con formas extrañas.
Proporcionando al ejemplar un espacio adecuado para que reciba la luz solar (sino se tuerce en busca de la misma), un terreno apropiado con los nutrientes exclusivamente necesarios y que drene correctamente según la cantidad de precipitaciones del lugar; en principio, la palmera tendría que sobrevivir. Y digo sobrevivir y no vivir, porque cuando sacamos a cualquier animal o planta de su hábitat originario, es complicado hacerle vivir.
Es cierto que las palmeras no requieren de un gran cuidado, pero hay que se consciente de que se trata de un ser vivo, y como tal, necesita unas condiciones de vida adecuadas a su entorno originario.
Esperamos que este artículo haya sido de utilidad.
Un saludo a tod@s.
La gente se alarma por las consecuencias que el derrumbe de estos ejemplares puede provocar, ya que en los últimos días, estos sucesos han causado tanto daños materiales como personales.
En primer lugar y tal y como explican los expertos en jardinería y flora, Valencia no es el hábitat original de las palmeras. Algunas especies, son más fuertes, y por lo tanto, soportan climas y terrenos extremos. Es este el caso de las distintas variedades de palmeras, pero todo tiene un límite.
Hay diferentes motivos por los que las palmeras se caen; sean o no las causas de lo que está ocurriendo en Valencia, os los contamos aquí.
1. RHYNCHOPHORUS FERRUGINEUS. (o Picudo Rojo)
Este bichito, originario del África tropical, disfruta perforando los troncos de las palmeras.
Por lo escuchado y visto, esta no sería la causa de las distintas palmeras caídas en la Comunidad Valenciana, pues cuando el Picudo Rojo ataca, la palmera tiene una apariencia amarillenta y marchita.
Eliminar la plaga de Picudo Rojo, es bastante complicado, y no existen demasiadas técnicas que permitan una solución óptima. Normalmente, se intenta tratar el ejemplar con insecticidas, tanto mediante aplicaciones foliares como mediante inyecciones, pero si finalmente no se consigue eliminar este resistente bichito, lo mejor es cortar por lo sano.
2. EL TERRENO Y EL CLIMA.
Las palmeras arraigan mejor en terrenos blandos como los del desierto, en los que penetran sus raíces varios metros hacia abajo, y por tanto, permite que la palmera disfrute de un mayor equilibrio.
Así, cuando sea el caso, si la variedad es productora de dátiles, consigue mantenerse eficazmente en pie.
Las palmeras son de secano, y por tanto, el exceso de agua o de nutrientes, puede provocar su muerte, incluso parcialmente, y por tanto, la palmera puede llegar a desplomarse sobre lo que pille debajo.
3. ESTRECHAMIENTO DEL TRONCO.
Cuando la palmera se limpia en exceso, y se eliminan demasiadas hojas verdes, se pueda dar un estrechamiento del tronco. Esto debilita a la palmera bastante, y si no consigue recuperarse puede terminar muriendo.
Está claro, que hay que eliminar las partes demasiado secas, y por supuesto limpiar para evitar plagas como la citada en el punto 1, pero hay que ser cuidadoso y meticuloso para así evitar un debilitamiento del ejemplar.
Además, limpiar con demasiado ansia, produce ciertas "heridas" en el tronco que aunque no lleven al estrechamiento del tronco, dejan secuelas en el desarrollo y vida de la palmera.
Si no limpiamos correctamente los ejemplares, puede haber excesivas hojas, que provoquen un gran peso, que la palmera en determinadas circunstancias no puede soportar.
4. ANOMALÍAS EN EL CRECIMIENTO.
Al igual que en los seres humanos, en el crecimiento de las variedades de flora, se producen anomalías. En el caso de los seres humanos, se pueden dar por dos motivos: malformaciones previas al nacimiento, o un desarrollo inadecuado. En el caso de los vegetales, lo normal es que una malformación o anomalía, se produzca como consecuencia de no proporcionar al ejemplar, los medios adecuados para su crecimiento.
Hay ocasiones, en las que lo menos que puede ocurrir, es que la palmera quede torcida para toda su vida. En otras ocasiones, se puede producir un crecimiento hacia adentro de las raíces, que hacen fuerza hacia el interior del tronco. También se dan malformaciones en las hojas, crecen con formas extrañas.
Proporcionando al ejemplar un espacio adecuado para que reciba la luz solar (sino se tuerce en busca de la misma), un terreno apropiado con los nutrientes exclusivamente necesarios y que drene correctamente según la cantidad de precipitaciones del lugar; en principio, la palmera tendría que sobrevivir. Y digo sobrevivir y no vivir, porque cuando sacamos a cualquier animal o planta de su hábitat originario, es complicado hacerle vivir.
Es cierto que las palmeras no requieren de un gran cuidado, pero hay que se consciente de que se trata de un ser vivo, y como tal, necesita unas condiciones de vida adecuadas a su entorno originario.
Esperamos que este artículo haya sido de utilidad.
Un saludo a tod@s.
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